domingo, 7 de noviembre de 2010
352 km lejos de ti
miércoles, 27 de octubre de 2010
Cruz Roja.
Durante una tarde se preguntas a personas con traje,a gente bien vestida y mi chaleco rojo actua como reflectante y me esquivan.
Ayer, encontré a un hombre, Salva de 38 años.
Salva llevaba un jersey y unos pantalones sucios, al principio pensé en no pararle pero andaba solo y decidí darle algo de conversación.
Le comenté si conocía Cruz Roja, y muy muy por encima lo que Cruz Roja hacía.
Salva me cortó y me dijo que me quería ayudar, que quería ayudar a Cruz Roja.
Me contó que cuando era más joven sus padres lo tiraron de casa. No sabe a penas escribir. Actualmente vive en una calle abandonada, da paseos, y esta buscando trabajo. Mientras tanto está cobrando del paro y le gustaría tener un piso alquilado. A pesar de vivir en una casa abandonada me dijo que el quería donar 10€ al mes y que ojalá pudiese darme más pero que actualmente no podía, que intentaría subirlo. Me lo decía preocupado.
Le comenté que no pasaba nada que 10€ estaban muy bien y que ojalá hubiese más gente como él, que teniendo más daban mucho menos y que muchas ni donaban 6€. El me dijo que no lo entendía, pero que prefería dar ese dinero para una buena causa que así al menos no se lo gastaría en algún vicio.
A continuación se sentó en el banco de al lado a donde yo estaba y de vez en cuando me hacía preguntas sobre Cruz Roja. La verdad es que no olía muy bien y su hindumentaria dejaba claro que hacía días que llevaba la misma ropa, pero Salva, al menos lo poco que podía dar lo dio, para quizás otro que lo necesitará más que él.
Ayer aprendí una gran lección.
Gracias.
domingo, 17 de octubre de 2010
Me apeteces
martes, 12 de octubre de 2010
domingo, 3 de octubre de 2010
352
lunes, 30 de agosto de 2010
jueves, 19 de agosto de 2010
RojoArdiente-GrisApagado
Digamos que el cielo representa ahora mismo lo que siento. Gris, lluvioso.
miércoles, 18 de agosto de 2010
A veces,
viernes, 6 de agosto de 2010
20
miércoles, 21 de julio de 2010
A cachos.
martes, 20 de julio de 2010
Salir.
lunes, 19 de julio de 2010
¿Sabeis?
Tengo tantas cosas que contaros que no sé como empezar.
No sé que le ocurre a mi vida, todo esta desordenado en mi interior.
Me siento mal por si hago daño a alguien pero también me duele que dicha persona parezca que pase. Creo que ya no lee esto pero de igual modo yo necesito expulsarlo así que lo siento si a alguien le afecta pero es lo que opino y pienso y necesito escribirlo.
Me apetece muchísimo perderme por ahí en un sitio donde nadie me conozca y se que echaré de menos muchas cosas pero eso es algo que ya se verá. De momento me apetece escaparme aunque sea sólo un día. Cojer un tren e irme.
Me apetece viajar en tren.
¿Y sabéis una cosa?
Mañana empiezo. Destino: castellon.
Mañana pasaré allí el día intentare hacer alguna foto y por la noche os contaré.
Por cierto no mencioné en la última entrada que...
SOMOS CAMPEONES DEL MUNDO.
Así que tras gran ilusión y entretenimiento se nos acabó el mundial al menos con un maravilloso resultado. Campeones.
En fin, ya os cuento. Hoy he pensado muchas cosas y creo que otras personas no piensan en ello tanto como yo.
En la ultima entrada del blog no quise poner nada del mundial porque consideraba dejar bonita la entrada. Pero dado que no he recibido noticias.. pues nada.
Que paséis buen día mañana.
Ya os cuento :)
Opinar me da la libertad de escribir y hoy como muchas otras veces escribo lo que opino.
Mi vida es un caos y nadie ayuda a remediarlo pero poco a poco lo voy intentando. Algunas cosas me duele pero como alguien me dijo... ha sido mi decisión.
jueves, 15 de julio de 2010
martes, 15 de junio de 2010
Y...?
Pasar por cualquier lugar donde he estado contigo y recordar el momento con una sonrisa. Sonrisa de... ¿enamorada? Puede ser...
¿Y por qué será que te quiero tanto?
Mi niño, mi pequeño, mi tesoro más preciado.
Lo mejor de mi vida.
Mi alegria.
Mi sonrisa.
Mi absoluta y más sincera felicidad.
viernes, 11 de junio de 2010
sábado, 5 de junio de 2010
sábado, 29 de mayo de 2010
+ ¿Un cenicero? - No, no fumará hoy.
Pantalones por la cintura, camiseta de tirantes ajustada, zapatos en mano, carmín rojo en los labios, pestañas extra largas, melena castaña al viento y ojos verdes penetrantes.
La noche de fiesta había acabado, se disponía a volver a casa tal como iba, descalza, tenía los pies molidos y no podía más con sus tacones. Acostumbrada al zapato plano aquello era un suicidio.
Rebuscaba entre su bolso rojo su paquete de cigarrillos, fumaba poco pero le gustaba fumar a solas, pensaba que le hacía sexy.
Ya había amanecido y por mucho que podais pensar de Nueva York ese amanecer era totalmente solitario, de repente una voz...
- No me gusta que fumes...
+ ¿Quién eres?
- Un chico.
+ ¡Genial! Si no me lo llegas a decir no lo hubiese sabido nunca.
- Que graciosa, ¿siempre eres así?
+ Sólo con algunos chicos. - ella sonríe a él le tiemblan las piernas.
- Ya entiendo... Bueno no te molesto más.
+ No, no me molestas, caminaba solitaria por las grandes calles de esta gran ciudad y me apetecía hablar con alguien, el camino a casa era demasiado largo...
- Si quieres, te acompaño a casa...
+ No suelo irme con desconocidos pero en fin, me has caído bien, haremos una excepción.
- Genial.
Anduvieron un buen rato sin a penas mediar mucha palabra, era guapo, pensó Clara. Sí, guapo, simpático y su mirada le daba aires de inteligente. Llevaba la corbata casi deshecha y un par de botones de la camisa desabrochados. Clara podía contemplar su piel bronceada. El sol, el verano.. el alcohol ingerido quizás estaban haciendo efecto ahora.
El caminaba cerca de ella respetando las distancias.
Ella pensaba que porque no se acercaba más. Tenía ganas de besarlo.
Caminaba distraido, hasta que de repente se paró.
- Bien, ya hemos llegado.
+ ¿Cómo que ya hemos llegado? Todavía quedan unos 20 minutos andando hacía mi casa.
- ¡Esta es mi cafetería favorita! ¡Hacen un batido de cacao impresionante! Desayunemos, yo invito.
+ Pero.. pero...
- Pero nada, te sentará bien.
Se sentaron en una mesa para dos, ella se colocó dolorida sus zapatos. Una señorita rubia de cabello largo muy guapa les atendió.
* ¿Que desean tomar? - preguntó la señorita rubia, muy educadamente.
- Dos batidos de cacao.
* ¿Eso es todo?
+ Mmm ¿puedes traer un cenicero?
* Sí, en seguida se lo traigo - contestó la señorita rubia con una sonrisa.
- No, no lo traiga no será necesario, no va a fumar.
La señorita rubia con cara de no saber que hacer finalmente dijo:
* Bueno.. ¿eso es todo?
- Sí, gracias. - Contestó él.
Cuando la camarera se marchó....
+ ¡Cómo te atreves a negar el cenicero! ¡Lo necesitaba! ¡Ahora no puedo fumar!
- Ves, se lo he dicho, que finalmente no fumarías.
+ Creo que te odio.- contestó Clara.
- Eso, dímelo después de haberte bebido el batido, después de haberte comprado una rosa en la floristería que hace esquina cerca de tu casa, y después de acompañarte a tu portal, besarte y desearte dulces sueños en una mañana de Domingo donde el sol ha salido porque tu estás en el mundo.
Ella sorprendida por todo aquello...
+ Pero.. pero.. ¿Cómo sabes que cerca de mi casa hay una floristería?
Ella hablaba nerviosa, voz entre cortada, lo miraba a los ojos con vergüenza no sabía por qué ya no pensaba en que le odiaba, ni si quiera tenía ganas de fumar.
- Pues... me enamoré de ti el día que me crucé contigo y mirando a una hermosa flor chocaste conmigo, tus ojos verdes y tu sonrisa produjeron una reacción química inigualable y maravillosa. Me giré para verte y vi como entrabas en tu portal... ese día te juré amor eterno.
+ ¿Puedo hacerte una pregunta?
- Sí, claro...
+ ¿Puedo cambiar el orden de lo dicho anteriormente, hasta llegar a mi portal?
- Mm si, claro - contestó él sin saber ciertamente a que se refería.
+ Bésame.
martes, 25 de mayo de 2010
¿Quien ha ganado?
Obviamente, escribo esto porque me es inevitable no pensar en ti a cada segundo, cada minuto... o sea que sabes la respuesta...
Te quiero muchísimo.
jueves, 20 de mayo de 2010
lunes, 17 de mayo de 2010
viernes, 7 de mayo de 2010
Para siempre...
Se puso sus vaqueros ceñidos, una camiseta con un dibujo de una superheroina y su sudadera preferida. Cogió sus gafas de sol, su casco y uno para él. Fue al garaje y arrancó su bala roja.
Después se dirijo a su destino, el tiempo parecía pasar y no se acercaba, cada 10 metros un semáforo en rojo la paraba.
Al cabo de un rato llegó, aparcó la moto y él con sus pequeños rizos al sol la esperaba, se quito el casco, alborotó su melena rubia y lo abrazó. Se besaron y se sonrieron.
Entonces ella dijo:
+ ¿Donde quieres ir?
- Contigo donde sea - contestó él.
Ella derretida por dentro sacó el casco que le había guardado y le dijo sube.
Él pensativo pero confiado, subió con una sonrisa y cara de curiosidad. Una vez en marcha él pregunto:
- ¿Donde vamos?
+ Donde sea.
Ambos sonrieron. Ella seguía con la mirada en la carretera. Él se preguntaba donde lo llevaría.
Ella sonreía a sus adentros, desde el momento en el que había formulado la pregunta, ¿donde quieres ir?, ella ya sabía lo que él contestaría por lo que su plan salía a pedir de boca.
Lo llevó a una playa, donde sólo estaban ellos dos. Una pequeño cenador de tela blanca con iluminación cálida por velas semi cubiertas y algunas lámparas decorativas que emitían una luz anaranjada que daba al lugar sensación de paz. Bajo el cenador, una mesa preparada y dos camareros trajeados con su típica servilleta de tela blanca sobre el brazo doblado.
Muy cerca una pequeña orquesta que acababa de poner su punto mágico al lugar en el que se encontraban.
Él sorprendido, perplejo, ella sonreía satisfecha.
Aparcó la moto y de la mano y los pies descalzos anduvieron por la arena hasta llegar a ese bonito lugar.
Él la besó sin saber articular palabra, no se lo esperaba, no sabía porque.
Alrededor del cenador mil fotos suyas, con sonrisas, con lenguas fuera, haciendo el tonto, bonitas, besándose, momentos alucinantes, increíbles, momentos de sus vidas que ya habían pasado, que habían pasado juntos.
Ella dijo:
+ Siéntate cariño, vamos a cenar. -Él se sentó, su cara de atónito y con mil preguntas en su cabeza se hacía notar.
Durante la cena conversaron, rieron, se besaron, jugaban con los pies y la arena y se cogían de la mano. Una velada más que preciosa, pero él continuaba preguntándose por que. Así que finalmente le preguntó:
- Cariño, ¿Y esto? ¿A que se debe?
Ella con su sonrisa en los labios le dijo:
+ Por que te lo mereces mi amor.
- Pero.. ¿por que?
+ Por ser lo mejor de mi vida, por ser la luz de mis ojos, por serlo todo.
Él a cada palabra sentía más ganas de abrazarle y sentirla tan fuerte que quería unirse a ella para siempre.
- Yo también te quiero mi vida, dijo él.
+ Cariño, yo no sólo te quiero, sino que... que te amo.
Y ella como siempre había sido muy atípica y muy espontánea, Se acercó a su silla y de rodillas y cogiéndole una mano le dijo:
+ Quiero pasar el resto de mi vida a tu lado, sé que no puedo vivir sin ti y eres lo mejor que he conocido nunca. ¿Quieres casarte conmigo, cariño? ¿Quieres pasar el resto de tu vida a mi lado, tesoro?
Y él con lágrimas de emoción en los ojos contestó:
- Claro que quiero cariño, claro que quiero, sin duda eres la chica más maravillosa del mundo.
Esa noche se besaron más fuerte que nunca, esa noche se convirtieron en uno, para siempre...
lunes, 12 de abril de 2010
16
Y aunque hablemos poco muy poco, porque él es así, yo le quiero y de algún modo quiero que quede en algún lugar para que un día quizás lejano recordemos que él con sus 16 recien cumplidos y yo con mis 18, dediqué un pequeño tiempo para escribirle que me tendrá para siempre.
Lucha por aquello que quieres, lo conseguirás, yo confio en ti.
Te quiero aunque pocas veces lo digamos.
jueves, 18 de marzo de 2010
Dentro y fuera.
miércoles, 3 de marzo de 2010
Celia
Se despierta de la cama con legañas y con la raya de los ojos difuminada porque anoche se le olvidó desmaquillarse. Se da cuenta de que ha dormido con la boca abierta. No hace muchos intentos por levantarse y se da media vuelta. Le ha sonado el despertador pero no se acuerda por qué tenía que madrugar. Anoche celebró algo, ella estaba feliz, hoy pasaba algo importante, pero el alcohol ingerido le ha producido una especie de amnesia y obvia el sonido del despertador para continuar durmiendo.
10:45
Se estira y se restriega sus ojos marrones, ahora esta mas descansada. De repente abre los ojos y mira el reloj, 10:47 ... Se queda pensando, hoy había algo importante y le fastidia no acordarse. La resaca llama a su cabeza alborotada y va a la cocina a tomarse una aspirina, por medio del pasillo los zapatos de anoche, la chaqueta y el bolso. Como al levantarse no había visto su movil en su mesita, imagina que continuará en el bolso o al menos eso espera. Rebusca y en el típico bolsillo interior lo encuentra, apagado... Sin batería. Lo enciende mientras va a la cocina y coje un vaso de agua para su aspirina, al encenderlo le llegan 20 mil mensajes.
El vaso de agua cae al suelo.
11:00
"Celia, donde estas? tq"
"Estas bien? cuando leas este sms hazme una perdida y te llamo besiitos!"
"Celia espero que hayas cogido el tren porque sale ahora"
"Celia me estoy preocupando, no das señales de vida dime algo tq"
"Celia tu movil sigue apagado y el tren ya ha llegado... sin ti..."
11:07
Celia se siente totalmente idiota, a las 9:05 salía su tren, destino su amor, Madrid. Y lo ha perdido por estúpida. No se atreve a hacerle una perdida a Diego porque la llamará y no sabe que decirle, es estúpida, idiota.. todo a perder.
Ahora mismo justo ahora, mientras ella esquiva cristales con sus pies descalzos de ese vaso de cristal roto, ella podría estar abrazándolo.
Maldice todo.
11:25
Recibe un mensaje al movil:
"Celia ve a la estación, acercate a la taquilla nº9 y tienes que decir, mi amor esta lejos hoy"
Ella con cara triste y una mueca que no llega a sonrisa, decide hacerle caso, no le queda otra, ya no pierde nada más.
11:30
Empieza a desmaquillarse, se viste tal y como había pensado ir a verle, peina esos cabellos alborotados y se dispone a salir de casa, de nuevo un mensaje:
"No olvides tu maleta, pequeña!"
Ella sonríe sin entender y coje la maleta que tenía preparada para su viaje, justo en la entrada de la casa.
12:45
Sale de casa con su maleta y sus gafas de sol puestas y se dirige a la estación del Norte - Valencia. Por el camino anda nerviosa, ¿¡Como se le ha podido olvidar?! Idiota... se siente idiota. Se coloca sus cascos con su "All you need is love" y empieza a escuchar mientras tararea y mueve su cabeza.
13:05
Llega a la estación y se dirige a la taquilla nº9 tal y como Diego había dicho, le da vergüenza y se siente un poco idiota - Sí, más aún que antes- pero de igual modo se acerca a la taquilla. Una mujer de pelo recogido y con una edad superior a los 40 años, dice buenos días.
Celia coje aire y dice:
- Mi amor esta lejos hoy.
La mujer sonríe y Celia le devuelve una sonrisa nerviosa.
- Celia, ¿Verdad?
- Sí, sí, soy yo.
- Muy bien, tenga señorita.
La mujer le tiende un sobre morado en el que pone "mi amor esta lejos hoy. Celia."
Celia con cara interrogante se aleja de la taquilla y se sienta en el banco que tenia a su izquierda, siempre le gusta leer las cosas sentada.
En la carta....
Celia intrigada y divertida le hace caso, su fecha de inicio era 09/09/09 así que dio 999 pasos hacia la derecha, arrastrando su maleta y donde por sorpresa encuentra una tienda de objetos varios de bajo precio. Se acerca y se pregunta si los habrá dado bien...
Entra y se dirige al mostrador.
-A mal tiempo buena cara. - dice Celia convencida y con una sonrisa.
El hombre con otra sonrisa contesta:
- Tome señorita. - y le tiende un paraguas rojo y un folio, escrito obviamente por la letra del hombre del mostrador.
- Muchas gracias.
Celia sale y se queda en la puerta con su maleta, el paraguas y el folio que le había dado el hombre y empieza a leer:
"Muy bien pequeña, me estás haciendo caso, ¡por fín no tengo que rendirme a tus cabezonerías! que pena que no esté viendo la sonrisa que pones ahora. Espero que estés en la puerta de donde te he dirigido antes, si caminas el número de pasos del día de nuestro primer beso, hacia tu derecha hayarás algo más si dices: Eres tan dulce como un terrón de azúcar. Suerte!
PD: Hoy llueve en Madrid.
Te adoro pequeña."
13:20
Celia intrigada y con una sonrisa más grande que su boca da 28 pasos a su derecha y se encuentra con una pastelería, se dirige a la dependienta y le dice su frase con una sonrisa, la dependienta ríe y le tiende una caja envuelta. Y encima un sobre. Abre la caja y dentro: un zumo, sus galletas favoritas y un bocadillo. Se despide y comienza a leer en la puerta de la pastelería.
"¡Bravo encanto! Lo estás haciendo genial, que orgulloso estoy de ti. Ahora únicamente tienes que ir al establecimiento que está en frente tuyo. ¿Acabas de mirar verdad? Pues dirígete allí y guarda todo aquello que estás consiguiendo, estás llegando a la meta. Te quiero Celia.
PD: ve y dí; "Pues que frío y que silencio, no? (y frotate las manos al decir que frío). "
13:25
Celia se acerca a la tienda y frotándose las manos dice: pues que frío y que silencio, ¿no?.
El hombre riendo le dice, celia ¿ verdad? Ella con una tímida sonrisa asinte y él le tiende una bufanda del color de su cabello y un CD de los Beatles. Ella sonriendo se coloca la bufanda, mete el CD en su discman y entonces el hombre le da un sobre amarillo donde se puede ver en el dorso la frase que ella debía decir incluso con el paréntesis. Y rápidamente lo abre y lo lee.
"Dirijete al anden número 9 dí que eres Celia y te darán lo último que necesitas. Te quiero."
13: 36
Celia corriendo, se dirige al andén mencionado y le dice a la chica que se encuentra en él, Soy Celia. La chica se queda pensativa y después su cerebro recuerda que debía hacer tendiéndole una pequeña almohada, un oso de peluche y un último sobre.
Celia sonriente se lo agradece, se aparta y comienza a leer:
"Bueno pequeña, espero que lleves todo aquello que has conseguido porque lo necesitas. Ahora puedes abrir el primer sobre morado donde encontrarás un billete de tren hacia Madrid. Como sé que con las prisas no has cogido nada para el viaje me he encargado de suministrarte algunos caprichos. En tus manos tendrás una pequeña almohada y un osito para que puedas dormir, si el viaje se te hace pesado podrás escuchar a tu grupo. La comida ya la has mirado, tienes bocadillo, algo para beber y unos pastelitos como postre. Al llegar me encontraras con los brazos abiertos. Colocate la bufanda al salir y abre tu paraguas, porque hoy llueve en Madrid.
Te amo"
13:55
Celia con una sonrisa casi más grande que ella, sonríe coge todas sus cosas se dirige al tren con destino Madrid y pasa su viaje escuchando a sus Beatles, comiendo y durmiendo.
16:22
Al llegar y con unos nervios en el estómago, se coloca su bufanda y sale decidida con una sonrisa buscando una mirada que se cruce con la suya, a los pocos pasos ahí está él, de pie. Tan guapo como siempre lo ha visto, corre, lo abraza y él susurra:
La espera contigo, siempre merece la pena, entonces Celia cree estar en el cielo.
domingo, 21 de febrero de 2010
Tipico idiota, guaperas
Pantalón corto vaquero, camiseta blanca y chaleco negro. Gafas de sol, melena rubia al viento. Cálido y bonito día de verano.
Pregunto el tren con mi destino.
"En ese anden de ahí señorita"
-Gracias muy amable.
A algo más de una hora me encontraba de mi destino. Subí al tren y busqué sitio. Al lado de la ventana. Perfecto. Encendí el movil, me puse los cascos y empecé a escuchar la radio.
Una hora más tarde, una llamada. La cojí.
-¿Sí? Dime.
- ¡Hola! ¡te queda mucho?
- Pues verás.. creo que unas 3 paradas.
- De acuerdo, ¡ahora vamos a por ti!
Y continué escuchando música hasta llegar. Nada más pisar tierra, fui en dirección opuesta a donde debía ir. Finalmente me encuentro y me recojen. Subo al coche. Charlamos, bajamos. Piscina.Nos cambiamos. Comemos, hablamos. Bici. Llegamos a un nuevo destino, muy próximo al anterior. Todo iba bien. Presentaciones, sonrisas, pequeñas charlas. Yo escuchaba atenta y reia cuando algo me hacía gracia.
- No chilleis que él esta durmiendo. - dijo alguien.
Todos seguimos igual pero con menos escándalo.
Entonces...
Entonces apareció él y el tiempo se detuvo. Mi corazón latía más deprisa, yo no me lo explicaba, pero simplemente lo observaba.
Aparecía de esa caravana, restregándose los ojos, ojos que después de quitarse las manos de la cara descubrí que con ayuda del sol, tenía unos ojos azules preciosos que contrastaban con su piel bronceada, y un pelo despeinado castaño. Sin camiseta y unos pantalones cortos de su equipo favorito. Yo me quedé sin habla.
Él me miró porque un chico nos presentó. Yo me levanté de la silla, pero él no hizo ningún movimiento de acercamiento. Levantó la mano a modo de saludo. Y yo contesté con un "Hola"y me senté de nuevo. Yo no quería parar de mirarle, me sorprendió su belleza, nunca había visto algo tan dulce.
Pero conforme fue hablando a media tarde me di cuenta de que perdía el encanto. La boca le perdía. Pensé; "es el típico gracioso idiota sin sentimientos" y me quedé con eso.
Antes de que se marchara, me giré, no podía dejar que se marchara sin volver a ver sus ojos, le vi y lo último que le dije, fue un adiós. Sabía que a la noche lo vería. Conservé la imagen a camara lenta de su bajada de la caravana y el restriego de sus preciosos ojos.
Bicis y de nuevo al primer lugar de llegada.
-¿Qué te ha parecido?
- Es guapo, es guapo.
Risas.
Cena, ducha, arreglarse. Esperamos al vecino. Subimos al coche y llegamos al lugar de encuentro. Media hora de reloj para esperarlo a él. Como odio que la gente no esté a la hora...
Lo esperamos, tras su llegada y cachondeos por su tardanza, nos marchamos al paseo que conduce a la playa.
Botellon. No bebo. Ponme un hielo, sujetame esto, ¿ese es mi bolso? Un chico me hace caso y comenzamos a hablar. Él no me mira. No me hace caso, tal y como solamente con verlo, ya había imaginado. Me rio de las tonterias que algunos dicen por el alcohol. Él va de aquí para allá, pero nunca se queda aquí. Después vamos todos andando, donde estan las discotecas.
Pasan tres chicas, una de ellas rellenita.
-Bombon, caramelo! eso es lo que tienes que dejar de comer, so gorda - le dice él y otro.
Risas del resto.
Y en mi mente lo pensado al principio. "Tipico idiota, tipico guaperas que va de listo".
Llegamos.
Entramos.
- Cuidamela bien eeh! - le dicen.
- Sí, no te preocupes. - contesta él.
A los 5 min ya me ha perdido de vista, rectifico, yo a él. Abandono en mitad de la disco, afortunadamente un chico del grupo se queda conmigo, después de 5min salimos. Nos sentamos todos.
Se sienta a mi lado. A mi derecha. Lo recuerdo. Un idiota se sienta a mi izquierda, pretende algo, finalmente se marcha, no le hago caso, yo lo miro a él. Me doy cuenta de que sus ojos realmente son verdes. Sus ojos son preciosos, pero lo tengo muy cerca y no me atrevo a mirarlo. Miro casi constantemente para abajo y sólo lo miro a la cara cuando alejo un poco la mia. Charlamos. Descubro que no es tal y como yo pensaba. Es dulce y parece buen chico, desde ese momento no se separa de mi en ningun momento de la noche. Me acompaña donde hubiese tenido que ir sola y me lleva en coche, cuando hubiese tenido que ir andando. Finalmente, después de toda la noche, se hace de día. He pasado una noche estupenda. Tan atento... me intriga.
De madrugada, vamos todos en coche, mientras varios desayunan, hay risas. Me rio mucho. No los conozco a penas y me tratan muy bien.
Tras una gracia sugiere que me quede. Yo rio y el resto también.
Vamos todos a la playa. El agua esta un poco fría, pero nos metemos igual. Al principio estamos todos, después quedamos los dos dentro. Hablamos de deporte. Pretemporadas y poco más. Le pregunto que como hablaremos y contesta que por messenger, pero ninguno de los dos se lo pide al otro. Nos separan unos tres metros.
- ¿Salimos? tengo frío.. - pregunta él.
- Sí, claro, como quieras.
Dejo un espacio en mi toalla, dado que la suya está ocupada, pero no viene, se mete en un espacio imposible y provoca que otro se ponga en la mía.
"Será idiota." - pienso...
Saco la cámara. Yo a su lado.
Nos tumbamos, estamos boca-abajo, esta vez de nuevo a mi derecha. Me quita la funda de la cámara. No me la da.
- Si te doy un beso, ¿me la darás?
- ¡Claro!
Primer beso que le doy, tan tonta no soy... No puedo dejar de mirarlo, es lo más bonito que jamás había visto.
A todo esto se hacen las 9 de la mañana, por si lo habían olvidado, no, todavía no hemos dormido. Ahora a la piscina.
Me ahoga. Yo no toco suelo. Me engancho en su espalda. Suave. Tras estar un rato. Salimos. Él tiene frío. Tapado hasta el cuello con la toalla, le sonrío. Mi tumbona esta en el sol, él en la sombra, le digo que si tiene frío que ponga su tumbona en el sol, pero él no entiende mi indirecta.
Sugieren comer algo en una mesa del bar.
Me levanto, me acerco a él, lo tapo bien y le beso la frente y le digo que le faltaba el beso de buenas noches.
Después, se sienta a mi lado. No quiero irme. No sé porqué pero me apetece estar con él.
Apoya los codos en la mesa y yo me echo hacia atrás. Le acaricio la espalda a la vez que él acaricia mi pierna izquierda. Sigo pensando que no quiero marcharme pero el tiempo pasa y va a llegar la hora. Incluso cojo el tren que no me toca; y cojo el siguiente que son dos horas después. Pero aún así yo no quiero irme. No quiero despedirme. Sé que cuando me vaya ya no sabré de él, pero el momento llega.
13:30 debo irme.
Me despido del resto. Él no está ahí, también se va a su carabana y está de pie en la salida. Me despido de dos con un encantada de haberos conocido y me marcho.
Cuando por último me toca él, miro esos preciosos ojos, y esa bella cara y a mi se me para el tiempo, quiero articular palabra, quiero decirle encantada de haberte conocido, pero no me sale. No me sale nada y me limito a los dos besos.
Finalmente digo, "¡Hasta luego!"
Pero yo sabía que no iba a volver a verlo... No iba a ver esa luz reflejada de esos ojos verdes que tanto me encantaron, ni iba a ver esa linda cara, ni iba a hablar con él, y yo me quedé con la curiosidad.
Y con dicha curiosidad me fui. El viaje de vuelta en tren se me pasó pensando en él.
Durante los días siguientes, no podía ni dormir, me había marcado la imagen de la primera vez que lo vi y esos días en los que sin saberlo nos habíamos ofrecido más cariño que cualquier persona hubiese pensado.
Una noche... a las 3 de la mañana, mi movil sonó. Una llamada perdida. Numero desconocido, lo vi y pensé "Por favor, que sea él".
Mi corazón se puso a latir a 100 por hora y yo, persona no creyente, recé para que ese número fuese él, porque yo no aguantaba una noche más sin dormir.
¿Quién decía que no existía el amor a primera vista?
jueves, 18 de febrero de 2010
"Nada valgo sin tu amor"
Es un día cualquiera, pero lo pienso.
Como dice una canción "nada valgo sin tu amor".
Eres todo ese conjunto de sensaciones, de momentos, de sentimientos, de cosquilleos que me encantan y que necesito. Que necesito de verdad. Y no lo digo por decir, no soy la típica niña tontita que le dice te quiero a todo el mundo. Yo, no los regalo, pero en cambio a ti... es que no te quiero, te amo.
¿Sinceramente? No sé que me enamoró de ti. ¿Tu sonrisa? ¿Tu mirada? ¿Tus besos? ¿Tu risa? ¿Tus caricias? ¿Tus abrazos?
No lo sé.
Creo que todo el conjunto, es decir, todo tu.
Un día de lo menos pensado apareciste y te quedaste en mi corazón. El espacio cada vez se hizo más grande, hasta que tu nombre un día se grabó con fuego en mi corazón.
Gonzalo.
Sí, lo llevo tatuado en el corazón.
Lo llevo tatuado en la sangre, en las venas. Lo llevo tatuado en el alma.
Y para siempre.
Por que no reconozco un día sin saber de ti. Porque no quiero saberlo, tampoco.
No podría decirte que formas parte de mi vida, porque mentiría.
Te puedo decir que eres mi vida, ahí no te engaño.
Lo que siento por ti es totalmente dulce, explosivo y sincero.
Creo que soy adicta a ti.
Adicta a tus sonrisas, a tus abrazos, tu risa y tus besos. Adicta a tus sorpresas, a tus caricias, a tu voz. Adicta a tus tonterías y tus no tonterías, adicta a tus perfecciones e imperfecciones. Adicta a aquello que haces, a aquello que haces conmigo. Adicta a cogerte de la mano. Adicta a mirarte, adicta a besarte y parar para susurrarte que te amo y seguir.
Soy adicta a tus instantes.
Soy adicta a mi vida, porque mi vida eres tu y no hay cosa en el mundo que me pueda hacer más feliz que tu, y tengo miedo. Tengo miedo de que un día no pueda ser más feliz de lo que soy ya, porque de veras que veo complicado poder ser más feliz de lo que lo soy ahora.
Pero sé que mientras tu, estés a mi lado, yo lo seré. Eres mi felicidad. Me devolviste a la vida, fuiste mi rayo de luz en ese pozo oscuro, mi rayo de esperanza y por mucho que pase tu siempre sigues y seguirás brillando, como un ángel, eres mi ángel de la guarda que brilla por si solo.
Tu siempre serás mi luz, tesoro.
viernes, 8 de enero de 2010
Hace unos meses escribiste...
Hoy hace un año que lo más bonito que hay en el mundo se cruzó en mi camino, hace 1 año de aquella tarde fría, hace 1 año que mis ojos te vieron y mi corazón te guardó un gran espacio dentro de él.
Porque desde el 18 de Noviembre de 2008 hasta hoy, han pasado tantiiiiiisimas cosas, pero todas con algo en común, TU, desde ese día mi vida ha girado en torno a ti y es la mejor decisión que he tomado en 17 [casi 18] años, porque haces fácil lo difícil, posible lo imposible, bonito lo feo, agradable lo desagradable y todo con una sonrisa en la boca, y que sonrisa!
Dios, no me salen más palabras... Eres todo lo que necesito a mi lado, y lo siento si la actualización se ha hecho rogar... pero estaba esperando el día indicado, y un día como hoy da igual la inspiración porque los dedos escriben solos, mejor dicho, mi corazón escribe solo.... si cariño, también me has enseñado a escribir con el corazón, si es que, ¿Que hay que no puedas conseguir?
Joder Laura, TE AMO
domingo, 3 de enero de 2010
Ella... él...
El cielo era azul, los pájaros cantaban, y el sol hacia brillar su cabello rubio. No parecía un típico día de invierno, pero a ella siempre le ha fascinado todo aquello que es diferente.
Se vistió, cogió su cámara de fotos y decidió comenzar una excursión.
Se subió a su vespa roja, se puso el casco y se dirigió al centro de Valencia. En el centro, siempre hay cosas que fotografiar. A ella le gusta las cosas antiguas y le gusta fotografiar esos edificios antiguos, con esas fachadas tan preciosas.
Así que, aparcó su vespa en un lugar donde no molestara y prendió su camino entre las pequeñas calles de la ciudad mediterránea. Fotografió todo aquello que le pareció interesante y lo que no también. Entonces... vio un edificio precioso, se echó hacia atrás para enfocar y una vez enfocado...
"¡Click!"
Pero la foto no quedó como deseaba, para su sorpresa un chico pasó por el medio y su imagen de perfil salió en la fotografía. Él se dio cuenta de que había salido en medio de la foto.
- ¡Oh! Disculpa, perdona, no me he dado cuenta de que ibas a hacer una foto.
A ella no le importo demasiado que saliese. Tenía un perfil precioso. Sus ojos verdes destacaban sobre su tez morena del verano y su cabello castaño. Definitivamente pensó que era un ser precioso.
- No, no te preocupes, siempre puedo repetirla. Gracias a Dios, los edificios todavía no caminan.
Ambos sonrieron.
- Sí cierto, pero me ha sabido mal, a mi también me gusta este tema de la fotografía y cuando tengo el enfoque perfecto y alguien lo fastidia, me da mucha rabia.
- Sí a mi también me pasa, pero suele pasarme si lo que estoy enfocando esta en movimiento o si es, ese instante en concreto pero al tratarse de un edificio, siempre podré fotografiarlo.
- Sí, tienes razón, pero aún así disculpa.
Ella sonrío dulcemente a modo de un "no te preocupes, no importa".
Le temblaban las piernas, él tenía un rostro perfecto, o al menos ella lo creyó así. Le entraron unas ganas enormes de fotografiarlo. Pero le dio vergüenza decirle nada y dejó que tras una simple despedida de dos jóvenes desconocidos, se marchara.
Continuó su excursión, pero ya no pudo concentrarse en nada. Ahora nada le llamaba la atención, eso quedó en el momento en el que fotografió por casualidad a ese joven, del cual no sabía ni su nombre.
Se dio cuenta de que la tarde de excursión terminó en el momento en el que él se marchó.
Fue a por su vespa y volvió a casa.
Durante la noche...
No podía creerlo, no dejaba de pensar en él. Pasó las fotos al ordenador y en pantalla completa, dejó la de ese joven misterioso que pasó justo en el perfecto instante para capturarlo.
Entonces, alguien llamó al telefonillo de casa. Cuando lo cogió y se lo puso en la oreja escuchó como varios vecinos contestaban alternadamente:
-¿Quién?
-¿Quién es?
-¿Hay alguien ahí?
Y entonces escuchó una voz jovial que preguntaba : "¿Te gusta la fotografía? ¿Tiene una hija que le guste la fotografía?".
Entonces ella, sin saber porqué, contestó. "A mi me gusta".
Pudo imaginar la cara de sorpresa del joven, a lo que éste contestó: Dime por favor que eres rubia.
Ella rió y dijo si así eres feliz, sí, lo soy.
A lo que él con la voz más seria, dijo:
- No, por favor, es importante.
Ella perpleja porqué no sabía ni si quiera por que había dicho que a ella si le gustaba la fotografía contestó.
- Pues sí, sí lo soy.
- ¿Hoy has estado por valencia, fotografiando?
- Sí, sí.- contestó ella ya, intrigada.
- ¿Has fotografiado sin querer a un joven que al pasar, fastidió aquello que querías fotografiar?
- Bueno.. en cierto modo, sí pero...
Él, la interrumpió.
-¿Cómo te llamas?
-¿Perdona? No entiendo de que va esto, no sé quien eres, no sé porque me haces estas preguntas, ni sé como sabes todas esas cosas.
- Sólo por favor, dime tu nombre.. por favor... - Su voz, era dulce.
- Alicia, me llamo Alicia.
- Yo soy el chico que fastidió tu foto y Alicia, hoy me he enamorado. Me he enamorado de tu sonrisa. En el momento que me encontré contigo por una agradable casualidad, no dejé de pensar en ti, cojí mi moto y te seguí. Ví como no fotografiaste más, ví como andabas pensativa por la ciudad y te seguí hasta parar en tu casa. No podía dejarte escapar.
Al instante, soltó el telefonillo y se escucho como alguien bajaba las escaleras, velozmente...
A continuación se escuchó la puerta del patio y se dieron un gran abrazo.
Ella no sabía porqué, realmente era un desconocido... Pero aún así le susurró:
"Creó que nací para esperarte".
viernes, 1 de enero de 2010
Empezando bien.
Premio otorgado por: Voy a comerte http://sonriedisfrutasefeliz.blogspot.com
La verdad, es algo que no esperaba.
Un día indagando por diversos blogs llegué a este como a varios otros. Lo vi y lo primero que me sorprendió fue que el fondo estaba lleno de circulitos de colores, anteriormente se llamaba sonrisaaa e inspiraba alegría y me gustó.
Comencé a leer entradas y también me gustaron, así que, comenté y seguí este blog.
Sinceramente os estoy hablando de hará una semana, no más.
Al poco leí un comentario: que le había gustado mi blog y que me seguía y además con varias palabras de agradecimiento por seguirle. Así que sonreí :)
Te agradezco mucho que en tan poco tiempo, te haya gustado mi blog, te hayas hecho seguidora y además me hayas otorgado el premio, al blog irresistible.
Lo recojo con mucha ilusión.
Gracias.
Desde aquí os invito a pasar por esos lugares.